Seguro que en la vida te has encontrado con muchas situaciones en las
que, bien por una alegría inmensa, por tristeza, por alivio, o simplemente por
cortar una cebolla, has acabado llorando. Bien, pues de la misma manera que el
llanto lo pueden provocar emociones tan distintas (y en algunos casos incluso
opuestas), las lágrimas que se producen en cada situación también cambian.
Las lágrimas no sólo están hechas de agua. Además de ésta, todas ellas
contienen sales, anticuerpos y lisozimas (un tipo de enzima que previene
infecciones bacterianas); y su composición final depende del tipo de situación
que provoca la lágrima. En 2013, la fotógrafa Rose-Lynn Fisher probó a observar
con un microscopio lágrimas provocadas por distintas situaciones y emociones, y
esto fue lo que se encontró:
Lágrimas producidas por alivio o liberación (©2013 Rose-Lynn Fisher) |
Lágrimas producidas por dolor o tristeza (©2013 Rose-Lynn Fisher) |
Lágrimas producidas por risa (©2013 Rose-Lynn Fisher) |
Lágrimas producidas por cortar una cebolla (©2013 Rose-Lynn Fisher) |
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